La obtención de jabón es una de las síntesis químicas más antiguas. A lo largo de los siglos se ha fabricado de forma artesanal, tratando las grasas, en caliente, con disoluciones de hidróxido de sodio o de potasio. Aún, hoy en día, se hace en casa a partir del aceite que sobra cuando se fríen los alimentos.
Si quieres hacer una pequeña cantidad de jabón sólo necesitas aceite, agua y sosa cáustica (hidróxido de sodio), producto que se puede comprar en las droguerías.
2. Añadir 300ml de aceite.
3. Remover continuamente hasta que espese. Podemos ayudarnos con ayuda de una batidora, en cuyo caso, se han de extremar las precauciones para evitar salpicaduras de sosa. Batir lentamente, y protegerse con guantes y gafas.
4. Para ayudar a espesar, se pueden añadir limaduras de jabón ya hecho.
5. Si se desea, se puede añadir esencias para dar olor, y colorantes para el color (colorante alimentario, azulete...)
6. verter la masa sobre los moldes .
7. dejar reposar unos días...
Y listo! Aquí teneis algunas fotos de su elaboración: